Osmaniye, la ciudad turca donde los vecinos duermen en tiendas de campaa: «Dejaremos los muebles en un almacn, no s dnde iremos» | elmundo.es

La desesperacin se aduea de las miles de familias que lo han perdido todo tras el terremoto

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Ferhat y su familia eran los vecinos del quinto de los apartamentos etin Faruk hasta el pasado 6 de febrero. El terremoto de magnitud 7,8 que sacudi Turqua aquel da, rompi las paredes, fachada y ventanas de su hogar. Ferhat se siente afortunado por no haber perdido a ningn familiar en el sismo, que ya suma 36.148 fallecidos y ms de 105.000 heridos. Su edificio no se derrumb pero es evidente que no puede volver. Parte de la fachada se ha despegado y hay zonas en las que el edificio no conecta con el suelo. Desde una de las ventanas del edificio se ven paredes rotas y falta parte del tejado.

Las autoridades turcas anunciaron que van a revisar todos los edificios de la zona afectada por el terremoto para ver si las estructuras que quedan en pie son habitables o deben ser demolidas. En Osmaniye han empezado a examinarlos y de momento ya son ms de 8.000 los edificios que deben ser demolidos urgentemente. En este proceso que se presume largo, Ferhat ha preferido ir a su casa a por sus cosas, a riesgo de que le caiga el edificio encima. «La escalera hacia el primer piso est rota. Llevamos varias horas sacando poco a poco los muebles con cuidado, desde el quinto», cuenta. «Nos hemos llevado los muebles y recuerdos. Los electrodomsticos los hemos dejado ah porque pesan mucho y nos da miedo», describe.

En el barrio ms afectado, Rahime Hatun, se conocen todos. Todos saben quin consigui salir de casa, quin ha sido rescatado e incluso quin falleci en el portal de su casa cuando el edificio se le vino encima. Los vecinos toman t en las esquinas sin saber bien qu hacer o dnde ir. «De momento dejaremos nuestros muebles en un almacn. No s an a dnde iremos», lamenta. En una calle perpendicular varios vecinos equipados con gras, sacan sus muebles a travs de las ventanas rotas de los edificios. Otros hacen guardia por turnos por miedo a que alguien venga a saquear sus hogares.

Unas calles ms all, en los Apartamentos Bilge, un edificio de nueve plantas, se derrumb por completo. Tras terminar las labores de rescate retiraron los escombros y en una esquina, qued una montaa de pertenencias de las familias que vivan en el edificio. Ropa, fotografas y varios libros. Un par de vecinos miran las fotografas e intentan reconocer a los vecinos del edificio. Otro hombre, que perdi a su mujer y su hijo en el derrumbe de los Apartamentos Bilge, reconoce uno de los jerseys de su hijo. Lo abraza en silencio y se va.

Unas calles ms all, la polica ha cerrado el paso a una urbanizacin de cuarenta edificios que sufren riesgo de colapso. Cuatro edificios de la urbanizacin se derrumbaron por el sismo, causando ms de cien muertos. Varios vecinos miran con frustracin al otro lado de la cinta policial, por haber perdido a familiares, vecinos, tener que dejar atrs sus casas y no tener ms que lo que llevaban encima cuando salieron corriendo.

«Recuerdo el terremoto con mucha violencia. Nos despert, la cama rebotaba. Me levant a por mis hijos, una pared se derrumb, me ca al suelo y me levant corriendo. Cuando lo recuerdo me tiemblan las manos», explica Cumali. Este joven se ha construido su propia tienda de campaa cerca de su casa y ah vive con su mujer y sus cinco hijos. El terremoto ha parado la vida en este barrio de Osmaniye y de momento no ha vuelto a trabajar en los mercados donde vende verdura. «Entr varias veces al edificio luego para llevarme algunas mantas, una estufa, para al menos pasar los das en la tienda», explica.

Las autoridades de la provincia han anunciado la creacin de un centro para recoger los muebles y recuerdos de los edificios derrumbados, catalogarlos y preservarlos hasta que sus dueos regresen a por ellos. Sin embargo muchos vecinos desconfan y prefieren recoger ellos mismos sus objetos ms preciados.

Miles de vecinos se han ido a vivir a los pueblos de alrededor o con familiares cercanos. Otros no han tenido ms opcin que esperar en una tienda de campaa. Cerca de la estacin de tren, en un polideportivo, los equipos de rescate AFAD han levantado centenares de tiendas de campaa, donde acogen a 10.000 personas. En apenas unos das se ha creado un nuevo ecosistema, en el que los ciudadanos entran al complejo diciendo el nmero de su tienda en la entrada, custodiada por la polica. Hay horarios de comida, limpieza y carga de mviles. Por la noche, los vecinos se renen alrededor de una hoguera mientras los nios juegan con globos. Los ms pequeos por un momento, olvidan que no estn en casa.