Un firma especializada en paraísos fiscales diseñó la entrada de STC en Telefónica

Maples Group, una firma fiduciaria con sede en Luxemburgo y especializada en la constitución y administración de sociedades en paraísos fiscales, fue la encargada de diseñar la estructura con la que Saudi Telecom Company (STC) ha entrado en Telefonica con el 9,9% del capital.

La operadora saudí contrató sus servicios hace meses para llevar a cabo la compra y cuenta además con varios de sus directivos como administradores de la firma domiciliada en Luxemburgo a través de la cual se realizó la operación.

Creada hace más de 50 años, Maples Group se presenta en su propia página web como experta en «servicios especializados fiduciarios, en administración de fondos y constitución y gestión de entidades de acuerdo con la legislación de las Islas Vírgenes Británicas, las Islas Caimán, Irlanda, Jersey y Luxemburgo».

Lo primero que hizo Maples Group fue constituir el 17 de mayo en Luxemburgo con 12.000 euros de capital la sociedad Green Bridge Management SARL. Esta firma, propiedad en su totalidad de STC, cuenta con tres administradores. Dos de ellos -Jorge Pérez Lozano y Thibault Hyacinthe Alois- figuran como senior vicepresident de Maples, mientras que el tercero, AlOthman Abdulrahman Abdullah es un ejecutivo de STC.

Tan solo cuatro días, Green Bridge Management constituyó a su vez la firma, Green Bridge Investment, que fue la que tomó la participación en Telefónica. Más allá de que, Maples puede crear nuevas sociedades interpuestas en otro país, de momento el hecho de controlar la participación en Telefónica desde Luxemburgo permite a STC eludir la tributación tanto por los dividendos que pueda percibir como por posibles plusvalías.

La operación

Además de Maples Gropus, STC contrató también para el diseño de y estructuración jurídica de la operación al bufete Linklaters (Arabia).El grupo saudí compró el 4,9% del capital social de Telefónica el pasado 5 de septiembre a través deGreen Bridge Investment y se hizo a través de Morgan Stanley, asesorad por Allen & Overy, con instrumentos financieros que confieren una exposición económica sobre otro 5,0%, una participación que no se podrá convertir en acciones hasta tener la aprobación del Gobierno.

STC cuenta ya con experiencia en la constitución de sociedades en territorios de baja tributación o incluso paraísos fiscales. De hecho, de acuerdo con su último informe anual de cuentas la operadora saudí cuenta, al menos, con una decena de sociedades de este tipo. En las Islas Vírgenes Británicas están domiciliadas así dos filiales participadas al cien por cien: Asia Telecom Holding y Turkey Holding.

La primera de ellas es una sociedad constituida en 2007 y que controla a su vez otra subsidiaria, Malaysia Holdings Ltd, domiciliada también en las Islas Vírgenes, y que agrupa los activos en este país asiático. Turkey Holding se constituyó un año después, en 2008, y , según explica STC en su informe, «es una sociedad creada para prestar servicios y apoyo necesarios en relación con actividades de inversión del grupo».

Territorios offshore

El grupo cuenta además con tres sociedades domiciliadas en Baréin, una país del Golfo Pérsico considerado también por la Unión Europea como un paraíso fiscal. Se trata, en concreto, de Gulf Invesment Holding, una sociedad que canaliza inversiones y financiación para otras empresas del grupo y que cuenta a su vez con tres subsidiarias con sede también en Baréin; GCC Cable Systems, constituida en 2021 para invertir en tecnología y la sociedad de la información en los países que integran el denominado Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Catar, Kuwait, Baréin y Omán) Y Bahrein BSC.

La relación de los saudies con los paraísos fiscales no acaba, sin embargo, aquí. Public Investment Fund (PIF), el fondo soberano del país que controla el 64% del capital de la operadora, tiene además una sociedad mixta junto al fondo Rusia Direct Investment Fund domiciliada en las Islas Caimán. Es una firma a través de la cual hay previstas inversiones en Rusia por un importe total de 10.000 millones de dólares (unos 9.200 millones de euros). No obstante, el fondo soberano saudí destinará solo 2.000 millones de dólares y el resto lo aportará el fondo ruso.

A la espera de la notificación

La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, aseguró ayer, por otro lado, que su cartera «estudiará con todo rigor seriedad» la entrada del grupo saudí STC en Telefónica, si bien ha recalcado que la compañía árabe todavía no ha remitido al Ministerio de Defensa la petición oficial para consolidar la totalidad de su irrupción en la operadora española, de la que se ha convertido en su principal accionista.

En una rueda de prensa celebrada ayer, Robles destacó que Defensa tiene un «papel fundamental» en esta operación, con la que STC adquirió el 9,9% de Telefónica -4,9% en acciones y un 5% en instrumentos financieros- a cambio de 2.100 millones. En ese sentido, para poder hacer efectivas las acciones correspondientes al 5% de los instrumentos financieros STC deberá contar con la aprobación de Defensa debido a la normativa vigente sobre inversores extracomunitarios que pretendan adquirir más del 10% de una empresas estratégica.