Los yacimientos arqueológicos más importantes de España

La península ibérica ha contado con la presencia en su territorio de casi todas las culturas desarrolladas en el Mediterráneo desde la Antigüedad hasta hoy: fenicios, griegos, romanos, púnicos, visigodos, musulmanes y otros tantos han dejado su impronta en la actual España, sin olvidar el riquísimo legado material de la prehistoria y el destacado registro fósil, clave para conocer la evolución del ser humano. Por ello el país cuenta con enclaves arqueológicos relevantes para la investigación del pasado y para el deleite de quienes visitan este envidiable catálogo cultural.

Atapuerca

Situado en Burgos, en la sierra que le da nombre, tenemos el yacimiento arqueológico más famoso de España y uno de los más importantes del mundo. Aunque la existencia de estas cavidades se conocía desde hacía siglos, no fue hasta el siglo XIX, con la construcción de una línea de ferrocarril, cuando empezaron a descubrirse restos prehistóricos. Y, sobre todo, Atapuerca tomó relevancia científica a partir de 1992 con los hallazgos realizados en la Sima de los Huesos.

Y es que, más que un yacimiento, Atapuerca es un conjunto de yacimientos. Sin duda, uno de los descubrimientos más importantes fueron unos restos humanos con más de 900 000 años de antigüedad que resultaron ser de una nueva especie: Homo antecessor. Se ha documentado la presencia de otras cuatro especies: preneandertal (500 000 años), Homo neanderthalensis (50 000 años) y Homo sapiens, así como otros restos aún por determinar, pero datados con 1 300 000 años de antigüedad, por lo que estamos ante los restos humanos más antiguos de Europa hallados hasta la fecha. La UNESCO declaró Atapuerca Patrimonio de la Humanidad en el año 2000.

Altamira

En esta cueva se descubrieron por primera vez pinturas rupestres de cara a la comunidad científica. Ubicado en Cantabria, este yacimiento rompió con la imagen que prevalecía hasta entonces del hombre prehistórico como un ser de las cavernas embrutecido que, después de que se reconociera la autenticidad de las pinturas de Altamira, quedó demostrado que nuestros antepasados prehistóricos tenían una sensibilidad y capacidad artística insospechada por los académicos decimonónicos.

Las paredes de Altamira están decoradas con pinturas de glifos, imprentas de manos y animales como sus famosos bisontes que le han valido para ser reconocida como la Capilla Sixtina del paleolítico.

Ampurias

Fue uno de los puertos más importantes de la península ibérica durante la Antigüedad. Fundada por colonos griegos llegados de Focea en el siglo VI a. C., su vigencia mercantil permaneció con la posterior presencia de los romanos. Al estudio de los elementos griegos, por tanto, se une el núcleo urbano que los romanos llenaron con termas, factorías y espacios para el ocio como el anfiteatro.

Itálica

Aunque si hay que destacar un lugar para estudiar una ciudad romana en España, el mejor exponente es el yacimiento de Itálica, en Santiponce, Sevilla. Sus orígenes se remontan el siglo III a. C. y aún conserva parte de estructuras como su majestuoso anfiteatro, el teatro, termas, templos, villas, el foro y donde se han descubierto algunos de los mejores mosaicos y esculturas romanas halladas en España.

Turuñuelo

La importancia de este yacimiento está aumentando con cada campaña de excavación dados los restos que se están descubriendo. Se trata de un enclave tartésico del siglo V a. C. situado en Guareña, Badajoz, alejado del espacio nuclear que se le atribuye a Tarteso, en el valle del Guadalquivir. Sin embargo, desde 2017 no dejan de desenterrar sorprendentes hallazgos como una escalinata que une las dos plantas de un edificio, los restos de un gran sacrificio (hecatombe) con decenas de caballos, mulas y burros, y uno de los últimos hallazgos ha dado la vuelta al mundo: unos rostros tallados en cerámica que dotan de más valor aún al yacimiento como uno de los más importantes para el estudio de la todavía misteriosa cultura tartésica.

Referencias: