Cuando una dictadura no se combate solo con dinero – El Venezolano News

(06 de octubre del 2023. El Venezolano).- Nicaragua siempre ha sido una curiosidad, una obsesión, una posibilidad, un punto de vista doloroso, pero también una oportunidad de lucirse en el ánimo de la opinión pública internacional, y sobre todo, en su dinámica interna, como esa Nicaragua de la auténtica Revolución Sandinista de 1979, que logró el interés de no pocos intelectuales del mundo, y en especial de escritores de resonancia mundial.

Por: Redacción El Venezolano

Y es que, el elogioso reconocimiento, en aquella ocasión, estuvo abanderado por cuatro premios Nobel de Literatura; García Márquez, Vargas Llosa, Gunter Grass y Harold Pinter, así como otro ramillete de integrado por los portentos Carlos Fuentes, William Styron, Graham Greene, Julio Cortázar y Salman Rushdie, todos con el pasaporte sellado en el aeropuerto Augusto César Sandino, de Managua, todos impregnados por la manera de cómo este país centroamericano, en un momento de su vida republicana extasío por su coraje colectivo, sus desgarradas formas de resistencias y su dignidad combativa ante, primero al dictador Anastasio Somoza, luego a la denominada “contra”, armada y financiada por Estados Unidos.

Hoy, cuatro décadas después, esas apologías merecen otras lecturas, como es lógico. Las circunstancias son tan perversas como aquellas que obligaron a Julio Cortázar a escribir Nicaragua tan violentamente dulce (1983). Sigue siendo violenta, y escasea su dulzura. En su andar por intentar dignificar su pasado, se ha reconfigurado de tal manera, que los males han empeorado, sus libertades han mermado a niveles increíbles, expulsiones y detenciones de voces disidentes al régimen que acaudilla el dirigente sandinista, Daniel Ortega junto a su esposa Rosario Murillo. 

Nada es lo que era antes, pero el contexto político y social es tan calamitoso, que los recursos económicos que muy diligentemente ha enviado la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, USAID, capítulo Nicaragua, (el monto exacto es de 157 millones, 899 mil 912 dólares) a algunas organizaciones, no han cumplido el objetivo de oxigenar y restablecer la democracia, sino que ha sostenido de manera sistemática la vida personal de sus dirigentes, lo cual contradice el ejercicio por las libertades que justifican a esos entes, y pone de manifiesto gravísimos actos de corrupción, que sin duda, benefician la oprobiosa dictadura Ortega-Murillo.

Ocho programas involucrados

Uno de los objetivos de la USAID, como agencia federal independiente, es la de planificar y administrar la asistencia económica y humanitaria en el mundo, pero ocho entidades en el país centroamericano, han enviciado el proceso, de espalda al vapuleado pueblo nicaragüense, que desconoce esos desembolsos que hace la agencia estadounidense desde el 2019, al menos en esta fase.

Hasta la fecha están involucrados ocho programas debidamente registrados en el USAID, con sus respectivos intermediarios y fechas de aportes (en dólares) y periodos a cumplir, y en su mayoría, con las metas sociales y políticas que cubrir. Ellas son: Programa Fortalecimiento de Medios (9.400.000), Voces para todos (10.350.000), Levantando Voces Nicaragüenses (16.000.000), Fronteras Digitales, el cual dispuso de 90 millones de dólares, el más abultado de todos; Alianzas para los Derechos Humanos y el Cambio (6.400.000), Fortalecer las Condiciones para la Reforma Democrática (15.000.000), Proyecto de Opinión Pública de América Latina (9.999.912), y Digital APEX (750.000).

De acuerdo con el Informe de Canalizaciones, reporte oficial de la USAID-Nicaragua, periodo 01 de octubre de 2022 al 31 de marzo de 2023, el Programa Fortalecimiento de Medios, le fue asignado la cantidad de 9 millones, 400 mil dólares, como indica arriba, con intermediación de la Fundación para la Libertad de Expresión y la Democracia (FLED), desde Costa Rica (Antigua Fundación Violeta Barrios de Chamarro).

El objetivo que se propuso este programa es el de promover la calidad y la excelencia entre los medios comprometidos con la participación ciudadana y el derecho, así como la libertad de expresión “como piedra angular de democracia y libertades civiles, garantizando la sostenibilidad de periodistas y medios independientes, outlets, como ejes centrales en el desarrollo y consolidación del estado de derecho”, señala el informe.

El documento también recalca, que los receptores de los fondos del “Programa Fortalecimiento de Medios”, son Carlos Fernando Chamorro Barrios, Fundación para la Libertad de expresión y democracia (FLED) Cristiana Chamorro Barrios y Ana Elisa Martínez, Noticias; Lucía Pineda Ubago, La Prensa; Juan Lorenzo Holmann Chamorro. También reciben dinero de este proyecto, Álvaro Martin Navarro, Nicaragua Investiga Jennyfer; Tatiana Ortiz Castillo, La Mesa Redonda;Sergio Marín Cornavaca, Bacanal Nica; Manuel Díaz, La Lupa; Maryotit Guevara, Divergentes; Wilfredo Ernesto Miranda Aburto y Radio Darío Aníbal Toruño Jirón.

¿Cuál ha sido el destino de esos recursos económicos? ¿Quién ha hecho un seguimiento riguroso de los gastos ¿Dónde se refleja el alcance e impacto del respaldo que ha hecho la USAID a los entes que se mantienen en el exilio? ¿A quién le reporta el Programa Fortalecimiento de Medios? ¿Cómo se manifiesta la transparencia en el manejo correcto de estos dineros? ¿Cómo y bajo qué tipo de parámetros se sustenta los gastos? 

Ética y transparencia en el manejo de los dineros

Interrogantes como estas ponen en duda la eficacia del manejo de los dineros aportados por la mencionada agencia federal estadounidense a programas como el antes mencionado, y también ponen en la mesa de discusión qué tan eficaces son, en materia de estrategia social y de asistencia, la inyección de dineros, a organizaciones que terminan desviando y personalizando los aportes. 

Tal corruptela también introduce el debate de la ausencia de ética y honestidad, en el combate contra la dictadura, lo que hace concluir que ciertamente los fondos son claves, pero su uso debe estar en consonancia con la ética para que las metas sean realistas.

En el documento, se señala también, que la USAID ha ayudado a contrarrestar falsas narrativas y desinformación, y ha promovido la supervivencia de normas democráticas, así como el aumento de la visibilidad internacional del estado de descomposición social de Nicaragua y su sistemática violación a los Derechos Humanos. 

Entretanto, el programa “Fortalecer las condiciones para la Reforma Democrática”, recibió un total de 15 millones de dólares, y su objetivo, según revela el reporte, es el de fomentar ciudadanía inclusiva y eficaz, así como la participación en entidades cívicas cuyo objetivo general es promover la reforma política y electoral e integridad en Nicaragua. 

El citado programa recibió esa cantidad de dinero para cubrir esos propósitos, entre octubre de 2019 y septiembre de 2024. Hasta hora no ha habido ningún tipo de reporte que justifique semejante monto. Aunque el documento expone las actividades que ha venido realizando este programa “Fortalecer las condiciones…”, entre otros, tales como apoyo a la observación electoral de las elecciones municipales de noviembre de 2022, y programas de soporte técnico.

Hay candidatos presidenciales desterrados por el matrimonio Ortega-Murillo, que están sin trabajo y que, sin duda, permanecen enfocados en este tipo de fondos, lo cual podría significar un importante apoyo a la hora de estructurar con firmeza una oposición en el exilio, con el único fin de reestablecer la democracia en Nicaragua. Objetivo que sí tiene claro la USAID.