Mientras Rusia y Ucrania se reunía por primera vez desde el comienzo de la guerra para negociar una salida al conflicto, los líderes de los países europeos se han dado cita en Albania, donde han vuelto a escenificar su apoyo a Kiev y han pedido intensificar la presión sobre el Kremlin para lograr un alto el fuego que siente las bases para un acuerdo de paz.
«Hay que mantener la presión sobre Rusia hasta que esté dispuesta a poner fin a la guerra», ha dicho el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que ha llamado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tan pronto como han concluido las negociaciones en Estambul. Lo ha hecho, eso sí, rodeado de los líderes de Alemania, Francia, Reino Unido y Polonia, que han mostrado su respaldo a Ucrania.
Las negociaciones han concluido con un acuerdo para un intercambio de prisioneros y el compromiso de las partes de mantener las conversaciones, pero sin visos de una tregua. «Al rechazar el alto el fuego y el diálogo con Ucrania, Rusia demuestra que no quiere la paz y que solo trata de ganar tiempo continuando la guerra», ha dicho el presidente francés, Emmanuel Macron, en una publicación en redes sociales.
«Si Rusia no está dispuesta a sentarse a la mesa de negociaciones, Putin deberá pagar el precio», ha advertido por su parte el primer ministro británico, Keir Starmer. El Reino Unido y la Unión Europea trabajan ya en un nuevo paquete de sanciones que apunta a los sectores financiero y de la energía, y para el que esperan contar también con el respaldo de Estados Unidos.
«Aumentaremos la presión sobre Putin hasta que esté listo para la paz», ha afirmado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también desde Albania. Von der Leyen ha confirmado que la UE está trabajando en medidas contra los gasoductos Nord Stream y North Stream 2, más buques de la llamada «flota fantasma» rusa, y que impondrá nuevas restricciones al precio del petróleo, además de nuevas sanciones contra el sector financiero.
En los márgenes de la cumbre, Zelenski se ha reunido además con la propia von der Leyen y el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa a quienes ha agradecido el paquete de sanciones que los veintisiete han acordado esta semana. También han abordado el camino de Ucrania hasta formar parte de la Unión Europea, que se ha convertido en una potencial garantía de seguridad en caso de acuerdo con Rusia, con la puerta de la OTAN prácticamente cerrada.
Comunidad Política Europea
Los líderes de casi medio centenar de países europeos se han dado cita este viernes en Tirana (Albania) para la sexta reunión de la Comunidad Política Europea. Un foro que fue creado en respuesta a la invasión rusa de Ucrania, con el objetivo de garantizar la estabilidad y la paz en el continente a través del diálogo, y que ha vuelto a servir para escenificar el respaldo a Ucrania. Solo Rusia y Bielorrusia están excluidas de la organización.
El color de la cumbre lo ha puesto su anfitrión, el primer ministro albanés, Edi Rama que ha recibido de rodillas a la primera ministra italiana, Georgia Meloni, se ha referido al francés Emmanuel Macron como «su majestad», y ha culpado a la delegación británica del mal tiempo en Tirana, bajo un chaparrón. Aunque en la agenda había cuestiones como la competitividad o la gestión de los flujos migratorios, han sido las negociaciones en Estambul lo que ha centrado la atención de los líderes.
Críticas a Putin
Putin, ha dicho Von der Leyen, primero pidió un alto el fuego «que luego nunca respetó», después, la UE y Washington propusieron una nueva tregua de 30 días, «que el presidente Putin rechazó», y ahora, Turquía se ofreció a acoger un cara a cara entre Putin y Zelenski al que el ruso no ha acudido. «Esto demuestra que el presidente Putin no quiere la paz», ha dicho la presidenta de la Comisión, «así que tenemos que aumentar la presión».
Desde Albania, el propio Zelenski ha lamentado que se haya perdido la oportunidad de «dar pasos importantes para acabar con esta guerra, si Putin no hubiera tenido miedo de venir a Turquía». El presidente ucraniano había advertido que dado que la delegación rusa no tenía poder suficiente para tomar decisiones, sería difícil logra avances concretos. «Nuestra prioridad numero uno es un alto el fuego incondicional», ha dicho Zelenski, «si los representantes de Rusia en Estambul no pueden ni acordar eso,» ha añadio, «estará claro que Putin continúa menoscabando la diplomacia».
«Putin ha cometido un grave error al enviar una delegación de bajo nivel», ha dicho el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, que considera que la pelota está ahora en el tejado del presidente ruso. Rutte ha destacado la voluntad de Ucrania de negociar y también el papel de Estados Unidos como mediador. «Creo que es obvio, no para los americanos, pero sí para los europeos y el mundo que si Putin envía una delegación de tan bajo nivel es porque no está interesado en ningún tipo de negociación«, ha subrayado en cambio el primer ministro de Lituania, Gintautas Paluckas a su llegada a la cumbre. Paluckas ha llamado Trump a ser realista y entender que Rusia no se sentará a la mesa «mientras no igualemos su poder en el campo de batalla».
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elperiodico.com
Publicado el: 2025-05-16 08:30:00
En la sección: El Periódico – internacional