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Cooperación entre Petro y Maduro reduce la posibilidad de un acuerdo en México, según Martínez Meucci

Cooperación entre Petro y Maduro reduce la posibilidad de un acuerdo en México, según Martínez Meucci

El politólogo Miguel Ángel Martínez Meucci considera que las condiciones políticas son hoy más adversas para que el chavismo y la oposición alcancen un acuerdo negociado en México. Sustenta su afirmación en cambios geopolíticos, como la guerra en Ucrania o el ascenso de Gustavo Petro al poder, que afirma fortalecen al régimen de Nicolás Maduro.

También en la asimetría de poder que hay entre el gobierno venezolano y la Plataforma Unitaria, lo que explica por qué Maduro no se siente obligado a ceder especialmente en materia electoral.

En medio de anuncios de un pronto reinicio de la negociación, que hacen políticos y actores de la sociedad civil, el doctor en conflicto político y procesos de pacificación se muestra menos optimista sobre los resultados que puede producir una reactivación.

Petro en la ecuación

“Las condiciones son más difíciles para ir a un diálogo porque Maduro se siente menos obligado de lo que se sentía hace ocho o nueve meses. Con la llegada de Petro, incluso, veo menos necesario para Maduro llegar a algún tipo de acuerdo negociado con la oposición y los Estados Unidos”, expone.

El profesor opina que el reconocimiento de Petro a Maduro y este nuevo relacionamiento “va a abrir todo un espacio de cooperación entre ambos gobiernos que va a ser muy favorable para Maduro”. “El efecto de las sanciones muy posiblemente se reduzca gracias a la cooperación que se va a establecer entre Petro y Maduro”, argumenta.

Adicionalmente, Martínez destaca el nuevo panorama internacional con la guerra en Ucrania, la crisis en Taiwán y los cambios de gobiernos en el continente americano (Gabriel Boric en Chile, recientemente Gustavo Petro en Colombia, etc) que a su juicio favorecen al gobierno chavista.

“Diversos gobiernos del mundo, sobre todo los democráticos, están cambiando su posición y política frente a Venezuela. Pasan muy pragmáticamente de una posición de no reconocimiento de Maduro como presidente legítimo hacia algunas formas de entendimiento con miras a tratar de mejorar relaciones con un país que produce petróleo, gas natural, y que es cercano a Rusia y a China en términos diplomáticos”, señala.

“Las condiciones estructurales en este momento no parecen muy atractivas de cara a Maduro y compañía para ir a un diálogo a México”, añade.

Asimetría de poder

La asimetría de poder, en la que Maduro está fortalecido y la oposición disminuida, es otro factor que “opera de fondo” y explica por qué la negociación de México fracasó en sus primeras rondas a pesar de contar con gran respaldo internacional y reglas claras de juego, apunta Martínez.

“La oposición venezolana ha perdido fuerza, con lo cual sus posibilidades en una negociación se reducen. Un factor importante en esto es que el apoyo de Estados Unidos tiene algunas fisuras en el sentido de que la propia Casa Blanca a enviado emisarios para buscar entendimientos mínimos con Maduro más allá del proceso de México, entonces, cuando el gobierno de Estados Unidos crea canales de comunicación por encima de la oposición reduce su posición”, explica.

Por otra parte, el politólogo ve que mientras el chavismo actúa como un actor unitario donde Maduro tiene la última palabra, a la oposición se le hace difícil configurar posiciones unitarias dada la multiplicidad de actores y esto es lo que el oficialismo busca explotar al buscar incorporar a más actores a la mesa de negociación.

Rusia es otro elemento que opera en contra de la posibilidad de un acuerdo negociado: “Dentro de la estructura del proceso de negociación se estableció la figura de países acompañantes que son Rusia y los Países Bajos. Pero a Rusia no le interesa que el gobierno de Maduro llegue a algún tipo de acuerdo con las fuerzas democráticas de Occidente, ve en Venezuela a un país que se encuentra bajo su influencia y además está en el hemisferio americano”.

¿Adelanto de presidenciales?

Además de la negociación, la amenaza de un adelanto de las elecciones presidenciales, previstas para 2024, también orbita en el mundo político venezolano.

Sobre esto, Martínez responde que es una posibilidad, aunque no la ve conveniente para el oficialismo en este momento: “En términos generales y esto no es una conjetura, es lo que se ha verificado en últimos 8 años en los que el gobierno ha manejado a voluntad los calendarios electorales y las ha cambiado a conveniencia, no sería raro que lo volviera a hacer. Ahora, ¿esto quiere decir que lo va a hacer nuevamente?, depende, con las condiciones actuales no parece que lo necesita demasiado. Pero si la oposición logra constituirse en amenaza seria no me extrañaría que cambie el calendario o las condiciones”.

Fuente de TenemosNoticias.com: efectococuyo.com

Publicado el: 2022-08-28 09:00:00
En la sección: Política – Efecto Cocuyo

Publicado en Política