El odio… gratuito y fácil

Siempre se cree que uno de los más abominables defectos de la humanidad es el odio y sobre esto muchos autores y estudiosos de la sicología, la filosofía y sociología, tienen su propia concepción sobre la cual trabajan para lograr de pronto bajar en el mundo los niveles de odio.-Existen otros como la envidia, la venganza, pero que analizados en su raíz es posible que tengan como  punto de partida o llegada al odio.-

Y aseguran los investigadores que estas cualidades negativas no son producto de genes o rezagos hereditarios, sino más bien dependen de factores sociales que se generan cuando la gente se ve discriminada u ofendida en su amor propio. Es como la reacción hacia alguna manifestación perjudicial o hiriente.-

En otras interpretaciones  aseveran que más de un antivalor desemboca en odio.- Unos lo definen como una emoción humana que consiste en desear o causar mal a una persona o a un género de personas, animales u objetos. Se infiere que es una tendencia permanente o circunstancial y en algunos casos tendría como causa la ira que puede crecer hasta el odio.

Se afirma que aunque a los casos extremos del lenguaje del odio, el derecho puede intervenir y la educación en derechos humanos, es la clave para que las identidades y las alteridades tengan una relación armoniosa, más allá del odio.-Además en algunas personas de acuerdo a su temperamento se vuelve manía o costumbre.-

En otras apreciaciones, como la del escritor Roberto Palacios, el odio se ha convertido en una de las emociones más fáciles de propiciar y al tiempo más difíciles de desarticular. Por ello, a falta de ideas es el combustible político. . Según él, todos estamos inmersos en la era de la ansiedad. Ella nos marca y nos define más que ningún otros rasgo.

Es preocupante que al paso de los años, pareciera que el odio se extendiera y que en muchas actividades de la vida diaria como que se apodera de personas que en algunas ocasiones se atreven a expresarlo con palabras gestos o señales o simplemente aunque nada digan en su yo, cargan con un odio silencioso que  lo suelen decir a determinadas amistades.-

Los entendidos sostienen que  en cualquier momento todos estamos expuestos a  caer en el odio, pero si nos tomamos un tiempo para la reflexión  y  llevamos a la práctica, el diálogo franco con la persona que causa daño. Recordemos que el amor de  Dios nos   propone  el perdón como la mejor herramienta para gozar de paz espiritual, la misma que  nos lleva a tomar actitudes de hermandad. Sólo así desterraremos el odio que en todo tiempo resulta gratuito y fácil.([email protected])