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Brasil impulsa en el G20 la reforma de la arquitectura de poder internacional: «Es inaceptable la parálisis del Consejo de Seguridad» | elmundo.es

Brasil impulsa en el G20 la reforma de la arquitectura de poder internacional: "Es inaceptable la parálisis del Consejo de Seguridad"

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Brasil lleva casi tres décadas insistiendo en lo mismo, pero febrero de 2024 le ofreció la constelación ideal: preside el G20 en medio de una grave crisis internacional que se manifiesta en la guerra de Ucrania y la guerra de Israel contra Hamas. Es el momento, cree la experimentada diplomacia de Itamaraty, de cambiar la arquitectura del poder mundial.

«Las instituciones multilaterales están mal equipadas para hacer frente a los retos actuales, como demuestra la inaceptable parálisis del Consejo de Seguridad en relación con los conflictos en curso», dijo el canciller brasileño, Mauro Vieira, durante la reunión de cancilleres que se celebró este miércoles y jueves en Río de Janeiro.

«Este estado de inacción implica directamente la pérdida de vidas inocentes», insistió. «Sin paz y cooperación será extremadamente difícil lograr la prometida movilización a gran escala de los recursos necesarios para hacer frente a las amenazas existenciales a las que nos enfrentamos, en particular la lucha contra la pobreza y la desigualdad y la protección del medio ambiente».

Vieira sabe bien de lo que habla, porque tuvo el honor de ser dos veces canciller de su país. Primero en un breve período antes de que el impeachment acabara con el gobierno de Dilma Rousseff, y ahora en la tercera presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva. El canciller explicó en detalle su propuesta de reforma del Consejo de Seguridad de la ONU en una entrevista con EL MUNDOen 2023.

«Siempre estuvimos del lado de los que quieren reformar el consejo, porque está perdiendo legitimidad, porque no representa más a los países y a las Naciones Unidas de 2023. En el momento de su creación, las Naciones Unidas integraban a 54 países, hoy son casi cuatro veces más, 193. En el Consejo de Seguridad no están representados África, un continente gigantesco con una gran población y 54 países. No está Latinoamérica, también una región importante, y tampoco están otros importantes actores internacionales como la India o Sudáfrica».

La posición de Brasil cuenta, entre otros países importantes, con el apoyo de Alemania.

«Por desgracia, las instituciones internacionales reflejan el mundo del siglo pasado, que es profundamente injusto. Especialmente en las grandes instituciones financieras, como el Banco Mundial y el FMI, la mayoría de los Estados no están representados», dijo la ministra de Asuntos Exteriores alemana, Annalena Baerbock, en una entrevista difundida este jueves por «O Globo».

«Nosotros, como alemanes y como Unión Europea, queremos cambiar eso, también en el Consejo de Seguridad. Estamos trabajando con Brasil y también con Sudáfrica. También estamos trabajando con India y otros países para dejar claro que el Consejo de Seguridad de la ONU ya no refleja el mundo actual y que es crucial avanzar en esta dirección. El año pasado obtuvimos un pequeño éxito en el G20, y yo personalmente hice mucha campaña en este sentido dentro de la UE. La Unión Africana tiene por fin un asiento permanente en la mesa del G20 y ahora esto debe ampliarse en las instituciones financieras, pero también en la ONU en Nueva York».

Brasil obtuvo también el apoyo de la UE en la voz de su Alto Representante para la Política Exterior, el español Josep Borrell: «Brasil ha conseguido poner sobre la mesa la preocupación de que el mundo emergente se está convirtiendo en uno de los líderes más importantes del mundo, de hecho. Y esta propuesta es muy significativa. Veremos cómo es aceptada. Pero una cosa es segura, si el Consejo de Seguridad tiene cada vez más vetos, será cada vez menos útil».

El ex ministro de Asuntos Exteriores español cree que los vetos de Estados Unidos sobre Gaza y de Rusia sobre Ucrania implican un «bloqueo» de las Naciones Unidas, una organización nacida con los escombros aún humeantes de la Segunda Guerra Mundial con el objetivo de mantener la paz y la seguridad internacionales.

«No hay confianza entre los miembros de la comunidad mundial, y el mundo está cada vez más polarizado. No se trata sólo de desacuerdos sobre la resolución de conflictos, sino de algo mucho más existencial, que es la vida y la muerte», dijo Borrell.

«Nuestro objetivo es hacer que lo que tenemos funcione mejor, no necesariamente crear algo nuevo. Nuestro objetivo es hacer que las instituciones funcionen. Y para ello, cuantos más participantes tengamos en la mesa, mejor. Cambiar las reglas de lo que existe hoy es más complicado», concluyó el jefe de la diplomacia europea.

Tras las presidencias de India (2022), Indonesia (2023) y Brasil (2024), el G20 será conducido en 2025 por Sudáfrica, antes de que en 2026 una gran potencia como Estados Unidos asuma el mando.

Brasil le ha dedicado especial atención y trabajo a su presidencia, con el objetivo de reinstalar a Lula como líder mundial y avanzar en la reforma de las instituciones internacionales. Así, los cancilleres volverán a reunirse en el marco del G20 al margen de la asamblea general de las Naciones Unidas (ONU), en septiembre en Nueva York.

«Allí haremos un llamamiento a la acción. El papel del G20 es dar un impulso político a los grandes debates. Lo que queremos es un impulso político que deje claro que tenemos instituciones internacionales obsoletas y que, nos guste o no, hay que reformarlas», dijo a «O Globo» una alta fuente de la Presidencia brasileña. «Esto se aplica tanto a los organismos políticos como a los económicos. Sólo con esta llamada a la acción, nuestra presidencia será más que exitosa. Y el G20 no es una organización internacional. Es un mecanismo de gobernanza. Si las instituciones funcionaran, quizá el G20 ni siquiera sería necesario».

Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es

Publicado el: 2024-02-22 14:55:55
En la sección: Internacional // elmundo

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