En las casas de España, el vinagre, el limón y el bicarbonato no pueden faltar en la cocina. Con estos productos conseguimos limpiar muchos accesorios de cocina. Entre ellos el horno. Limpiar la bandeja del horno puede ser una tarea complicada debido a los residuos quemados y la grasa acumulada.
En el momento te pareció una idea maravillosa, pero a la hora de limpiar la bandeja del horno, la idea de volver a hacer una receta con queso gratinado se desvanece al tener que limpiar los restos pegados. Sin embargo, hay un truco eficaz y sencillo que utiliza ingredientes caseros para llevar a cabo esta tarea sin complicaciones: bicarbonato de sodio y vinagre.
Cómo limpiar la bandeja del horno
Desde Teka lo tienen claro: «No intentes quitar las manchas con medios agresivos como estropajos metálicos, cepillos de alambre o cualquier utensilio que pueda rayar el esmalte«.
En el mercado existen varios productos de limpieza; sin embargo, si no quieres usar productos químicos, esta es una buena opción. Lo primero, asegúrate de que el horno esté apagado, frío y seguro para manipular. Retira la bandeja del horno. Usa una espátula o un raspador de plástico para eliminar cuidadosamente cualquier residuo de comida o grasa suelta de la bandeja.
Espolvorea una capa generosa de bicarbonato de sodio sobre toda la superficie de la bandeja. Asegúrate de cubrir especialmente las áreas más afectadas por la grasa y los residuos quemados.
Después, añade vinagre blanco sobre el bicarbonato de sodio. La mezcla comenzará a burbujear y espumar (es normal), y deja que la mezcla repose durante la noche para manchas muy difíciles. De este modo, el producto penetrará y aflojará la suciedad acumulada.
Pasado este tiempo, lavaremos la bandeja con normalidad y veremos cómo las partículas comienzan a despegarse con mayor facilidad. Para áreas especialmente difíciles, puedes hacer una pasta espesa con más bicarbonato de sodio y un poco de agua para aplicar directamente sobre estas manchas antes de fregar.
Cómo limpiar el resto del horno
Con los hornos pirolíticos es mucho más fácil, pero con los hornos más antiguos —los de toda la vida— hay que conformarse con frotar. Las partes más resecas no se van tan fácil y usando un estropajo se corre el riesgo de rayar el horno. ¿Qué hacemos entonces?
El vinagre con bicarbonato es una mezcla clave para limpiar a fondo el horno, pero con un factor añadido: el calor y el vapor de agua. Primero, mezcla un vaso del bicarbonato, un vaso de agua y un chorro de vinagre. Remueve bien la mezcla y aplícala en el horno. Luego, introduce un recipiente para horno lleno de agua en su interior. Enciende el horno (unos 45-50 minutos a 100 grados).
Con el vapor del agua del recipiente y el producto natural que has puesto para limpiar el horno, la suciedad ya estará blanda y saldrá fácilmente con un paño.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.20minutos.es
Publicado el: 2024-02-11 02:00:00
En la sección: 20MINUTOS.ES – Gastronomía