La música truena, con su sacudido pop, mientras el público enloquece. “¡Levantad las banderas! Venga, todos juntos mientras llega”, grita el maestro de ceremonias, mientras decenas de miles obedecen.
La emoción estalla cuando llega él, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, micrófono en mano y gafas de sol de aviador. “Os saludo de todo corazón. Todos estamos aquí por lo que está sufriendo el pueblo palestino. Lo estamos viendo con nuestros ojos, el mundo entero lo ve”, empieza Erdogan. Delante de él, un mar de banderas turcas y palestinas se remueven en el aire. Las banderas turcas, sin embargo, ganan en tamaño y número.
“Queridos hermanos, somos una nación tan grande, un Estado tan poderoso que nuestra lucha no se queda solo dentro de nuestras fronteras. Hoy esta gran nación dedica sus frases por el dolor que nos causa lo que está pasando en Gaza. Y lo digo claro porque este país no les debe nada: Israel es una organización terrorista”, ha dicho Erdogan en su mitin de Estambul, que ha simbolizado un punto de inflexión total en la retórica del presidente turco.
En las primeras semanas de guerra entre Hamás e Israel, Erdogan se posicionó —con discursos comedidos, llamando a la calma a las dos partes— como posible mediador en el conflicto, como posible puente entre la organización que controla Gaza y el gobierno del primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu.
Todo esto, sin embargo, ha quedado atrás. “Israel es un Estado ocupante, y si Hamás es terrorista, entonces Netanyahu lo es tanto como ellos. Queridos ciudadanos, mirad: estamos trabajando en reunir pruebas y mostrar internacionalmente que Israel está cometiendo crímenes de guerra en Gaza”, ha dicho Erdogan, en un discurso de también marcada retórica nacionalista.
Centenario de Turquía
Tiene motivos: este domingo Turquía celebra el centenario de su fundación, en 1923, de la mano de Mustafa Kemal Atatürk, que libró y ganó la guerra de Independencia contra Grecia y terminó con la ocupación de Francia, el Reino Unido e Italia de Estambul.
Erdogan, de hecho, ha comparado esa ocupación con la que ahora realiza Israel en Cisjordania y Gaza. “En la actualidad vemos una versión moderna de lo que hace cien años intentaron los griegos y los armenios, que intentaron eliminar a la gran nación turca. No permitiremos que sus planes se cumplan. En esto estamos todos de acuerdo, ¿verdad?”, ha dicho Erdogan ante los seguidores reunidos este sábado, de los sectores más conservadores e islamistas de la población turca.
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“Gracias a Dios aquí no tenemos guerra ni nos caen bombas, pero no podemos quedarnos callados ante lo que está haciendo Israel en Gaza”, explica Mehmet, un turco islamista en la manifestación: “Nunca me callaré si en algún lugar del mundo se está vertiendo sangre musulmana. Jamás me callaré”.
En la palestra, en su salsa, Erdogan se soltaba. Después de sus acusaciones a Israel, el presidente turco pasó a su segundo objetivo verbal favorito: occidente. “Todos lloraban y gritaban al cielo cuando Rusia bombardea Ucrania, pero ahora no dicen nada. Ahora miran sin decir nada al ver cómo niños son asesinados sin piedad en Gaza. ¡Eh, occidente! ¿Por qué calláis? ¿Por qué no decís nada?”.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.elperiodico.com
Publicado el: 2023-10-28 06:16:48
En la sección: El Periódico – internacional