La ciudad italiana de Milán (norte) celebró hoy el centenario del nacimiento de la astrofísica y divulgadora Marguerita Hack e inauguró una escultura en su honor, la primera en suelo público dedicada a una mujer científica en todo el país.
«La estatua de Margherita Hack, descubierta hoy en (la calle) Largo Righini, es verdaderamente hermosa y honra a una grandísima mujer que ha dado lustre a nuestro país», celebró el alcalde milanés, Giuseppe Sala, en sus redes sociales.
La escultura, que representa a una mujer que mira al cielo, se encuentra en los jardines de la Universidad Estatal de Milán, y es la primera dispuesta en suelo público dedicada a una científica, según declaró el concejal de Cultura milanés, Tommaso Sacchi.
Hack, nacida el 12 de junio de 1922 en Florencia y fallecida el 29 de junio de 2013 en Trieste (norte) a los 91 años de edad a causa de sus problemas cardíacos, fue una conocida astrofísica, divulgadora y activista italiana.
Licenciada en Física en 1945, año del fin de la II Guerra Mundial, realizó diferentes colaboraciones con centros tanto dentro como fuera de Italia, entre ellos las prestigiosas universidades estadounidenses de Berkeley o Princeton.
Desarrolló una amplia trayectoria como profesora de Física en la Universidad de Trieste y durante más de veinte años, entre 1964 y 1987, dirigió el Observatorio Astronómico de esa ciudad, convirtiéndose así en la primera mujer en Italia en estar al frente de un centro de este tipo.
Además de su pasión por la ciencia, demostró un fuerte compromiso con la sociedad y la política italiana, presentándose a las elecciones en diferentes ocasiones en las listas del Partido Comunista, logrando un escaño de diputada en 2006.
No obstante, acabó renunciando para dedicarse a tiempo completo a la astronomía.
Conocida como «la amiga de las estrellas», título que ella misma dio a una autobiografía que publicó en 1998, Hack luchó de forma activa contra la discriminación sexual de las mujeres y en favor de los derechos de los homosexuales.
Atea convencida, se mostró a favor de la eutanasia y de la libertad en la investigación científica.
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El pasado septiembre Milán inauguró la primera dedicada a una mujer, a la intelectual del siglo XIX Cristina Trivulzio di Belgioioso, pues las otras 121 estatuas que aparecen en sus calles eran de hombres.
Por otro lado, frecuentemente surgen peticiones para celebrar en el espacio público italiano a las grandes científicas e investigadores del país, como por ejemplo Rita Levi Montalcini, Nobel de Medicina de 1986.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.elperiodico.com
Publicado el: 2022-06-16 17:35:49
En la sección: El Periódico – internacional