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Entrevista con el maestro poeta Juan Calzadilla

Juan Calzadilla

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El pasado sábado cuatro de noviembre, mientras ensayábamos para la Gala Aniversaria 140 Años del Teatro Baralt, en un receso oportuno logramos contactar, por teléfono, al eximio maestro del arte y la crítica en Venezuela, el maestro poeta, Juan Calzadilla (Altagracia de Orituco, 16 de mayo de 1930), quien desde su residencia, en Caracas, aceptó, feliz, jugar junto conmigo este gratísimo juego poético-periodístico que Noticia Al Día publica hoy como un Regalo de Navidad para todos sus consecuentes lectores. Poseedor de una lucidez extraordinaria, algo sordo pero con espléndido sentido del humor y una exquisita capacidad intelectual sustentada en una memoria precisa y tierna, el artista e intelectual de 92 años y contando, procesó con maestría los once racimos de preguntas, construidos desde otro juego avalado por él mismo: decidí invitar a algunos artistas de mi afecto pleno para que acompañara esta ingente reflexión acerca del universo Calzadilla, desde el propio Juan, quien luego incluyó algunas hojas sueltas de reflexión y análisis sobre la historia del arte en Venezuela y, como estupendo corolario de nuestro gran regalo biográfico, él mismo nos autorizó a colocar sendos links mediante los cuales el Lector podrá descargar, gratis, sus dos últimos libros. Un invalorable obsequio del Premio Nacional de Cultura de Venezuela 1996 Mención Artes Plásticas.

El desarrollo de este trabajo da para un nuevo libro y así hemos querido ofrecerlo hoy, como un amplio recorrido acerca de la vida y obra de quien estuvo viviendo en Maracaibo, ciudad en la que organizó y realizó el Salón Espacios Vivientes, entre el 14 y el 28 de febrero de 1960. Junto con el pintor y fotógrafo Daniel González (n. 1934), partió de la idea de asentar objetivos en juego, además de haber escogido la ciudad para un Salón de “pintura liberada”. Los puntos que colocan justifican a Maracaibo en respuesta a Caracas como meollo cultural del país. Allì presentaron la obra de Renzo Vestrini (1906–1976, padre de la periodista poeta Miyó Vestrini) un artista oriundo de Italia e inmigrante de posguerra que operó dentro del informalismo en Maracaibo desde 1955. Otros organizadores fueron Manuel Quintana Castillo, Perán Ermini, Josefina Urdaneta y Alberto Urdaneta, Carlos Contramaestre, Pascual Navarro, Rubén Núñez, Alberto Brandt, Jorge Castillo, Mercedes Pardo, Julio Borges, Marcos Miliani, Pedro Briceño, Fernando Irazábal, Raúl Garmendia, Hernán Dupuy, Ramón Vásquez Brito, Maruja Rolando, Mary Brandt, Molos Jonic, Teresa Casanovas, Rafael Sandoval, Puig, Luis Ramírez, Pedro González, Ralph Ermini, Almenar, Alcides López Orihuela y Jesús Rafael Soto. Dicho sea de paso, el texto de Calzadilla sobre el Salón registra 34 artistas.

Es tan amplia, densa y compleja la obra desarrollada y, sobretodo, aún vigente, del maestro poeta Calzadilla, que decidí renunciar a la conciencia cabal del espacio periodístico “per se” para expandir el necesario interés divulgativo de esta gloria muy viva y lúcida del arte y la creación contemporáneas en la Venezuela de estos dos últimos siglos. Toda la entrevista, con sus apostillas y los sendos libros, aparecen incluidos en esta edición de antología, donde, auspiciado por Noticia Al Día, el maestro poeta nos dice también ¡Feliz Navidad!…Leamosle…

1.-Usted trabajó un tiempo importante en Maracaibo como

artista y periodista…¿Cómo recuerda aquella época de la

ciudad?; ¿cuál fue su vinculación más importante con el

movimiento cultural de entonces?; ¿Qué significó el Grupo

Apocalipsis y como enfocaría la vinculación de la ciudad con

aquel movimiento?; ¿Podría perfilar el rol de cada uno de los

poetas y artistas involucrados con dicho movimiento?; ¿Cree

que el país cultural, e incluso la región misma, ha sido

consecuente y ha hecho honor con los aportes de

Apocalipsis?; ¿Quién de ellos ejerció mayor influencia sobre la

obra total aportada por el Grupo?

J.C.

-El grupo Apocalipsis fue una invención de Hesnor Rivera

(1928) quien había residido por corto tiempo en Chile, donde

recibió la influencia del surrealismo a través de una breve

militancia en el grupo Mandrágora, famoso en aquella época.

De regreso a Venezuela se estableció en Maracaibo en calidad

de periodista del diario Panorama donde llegó a ocuparse por

mucho tiempo de la sección cultural del diario. Para su

proyecto de fundar un grupo literario de espíritu libre y

dedicado a la poesía surrealista, Hesnor captó en el liceo

Udón Pérez a tres estudiantes: César David Rincón, Néstor

Leal y Atilio Storey Richardson. La nómina la completarán

Régulo Villegas, carupanero, estudiante de Derecho en LUZ

y Miyó Vestrini, hija adoptiva del pintor italiano Renzo Vestrini

y algún otro que no recuerdo. La actividad del grupo se centró

en la elaboración del cadáver exquisito, especie de juego y

creación de André Breton que consistía en el proceso de

reunirse para escribir, de forma colectiva, un texto en el cual

el participante, llegado su turno, anotara una frase absurda

sin conocer la que escribió el que le precedió antes en la

rueda. Atraído por esta fórmula, acepté la invitación de Apocalipsis

de trabajar con este grupo y viajé a Maracaibo con César

David Rincón, el más inquieto de los apocalípticos, para

incorporarme al grupo, tal como ocurrió, en marzo de 1956.

En Maracaibo residí durante seis meses de intenso trabajo con

el grupo que se reunía para escribir sus cadáveres en

cualquier parte de la ciudad donde hubiera gente, y

especialmente en los bares. Poco se ha hablado de la

actividad de Apocalipsis y de una labor que comprende la

redacción de cerca de 1000 cadáveres exquisitos por espacio

de 6 meses con que fueron cubiertas prácticamente todas las

calles del centro de la ciudad.

Perfilar el rol de cada uno de los integrantes del grupo,

individualizándolos, se me hace difícil ya que se sabe que con

el cadáver exquisito se busca un lenguaje uniforme y

despersonalizado, sin visos de estilo. Pero sí se pueden

establecer diferencias de tipo afectivo, intensidad temática,

mayor frecuencia del acto de escribir. De todo el grupo, Cesar

David fue el más impulsivo e irreverente, el más ganado por

la inspiración a flor de piel y quien por intemperante pagó con

la muerte su corto tiempo vivido. Seguido por Storey

Richardson quien abandonó sus estudios de música clásica y

descontento con lo que estaba haciendo se suicidó una tarde

rociándose con gasolina.

La única publicación que conocemos de Apocalipsis fue el

folleto “Paraíso de los condenados”, compilación cuyo autor

Régulo Villegas terminó su vida como abogado. En tanto que

Néstor Leal asumió papel moderador y censor frente a los

desusos del lenguaje que llevaban a la imprecación y el

arrebato durante la fabricación del cadáver exquisito.

Obsesivo, crítico y escrupuloso, Néstor llegó a ocupar durante

varios años la presidencia de Monte Ávila Editores, desde

donde hizo labor ejemplar.

Hesnor Rivera, por su parte no tenía necesidad de apoyarse

en el cadáver exquisito, pues él ya dominaba el verso

surrealista, tal como lo comprueba una extensa bibliografía

que lo ha llevado a ocupar posición magíster en los primeros

lugares de la poesía zuliana. En tanto que, a muy corta edad,

en Maracaibo, Miyó Vestrini estuvo alineada con Apocalipsis y

participó en varios talleres, sin poder superar el rechazo que a

su celosa madre le inspiraba la actividad literaria de su arisca

hija, relación que afectó profundamente su vida emotiva,

hasta llevarla al suicidio, más tarde, en Caracas.

El grupo Apocalipsis no alcanzó a labrar una tradición fuerte

en la literatura maracucha, que pudiera verse reflejada en el

interés con que se tomaba en serio el Surrealismo y la

improvisación, si bien despertó simpatías en la población y

afectó a los pocos valores que sembró principalmente en la

pintura, con Francisco Hung, un abnegado producto de

Apocalipsis. Ni el grupo fue comprendido y estudiado por la

crítica al punto de que hubiera quedado sobre él un libro o un

estudio o crítica o hemeroteca. Un acervo de piezas, sino

nada.

2 Registramos el interés de un anónimo grupo de docentes

por conocer su pensamiento sobre el asunto de la educación

artística, visto desde su propia experiencia. ¿Puede comparar

la educación temprana que recibió usted, con respecto a lo

que ahora es y cuál es su parecer al respecto?; ¿Qué tipo de

educación encauzaría la formación artística o en valores

espirituales y culturales?; ¿Cómo albergar el fenómeno

inquietante de la inteligencia artificial, dentro de este actual

contexto social y educativo?; ¿qué recomendaría con relación

a estos temas de la pedagogía, e incluso de la andragogía?

J.C.

-Soy de opinión que en materia de educación artística

tomamos un camino equivocado cuyo error estuvo en creer

que al abandonar la Academia alcanzaríamos la total libertad

de ejecución para hacer lo que queramos en arte. Fue esta

idea lo que llevó a la mutilación y mutación de la Escuela de

Artes Plásticas de Caracas en 1958, y la ubicación que de ella

se hizo en la avenida México, contigua a la nueva sede de la

Seguridad Nacional. EL plantel no volvió a sacar cabeza y

desde esa fecha vive en postración, simplemente vegeta.

En materia de educación, yo soy un hijo de la improvisación,

un autodidacta forjado en la calle y en la lectura del

movimiento artístico desatado en Caracas a raíz de la

controversia del abstraccionismo geométrico con el realismo

social, de todo lo cual, como investigador de arte obtuve,

métodos de interpretación creados por mí mismo. Todo eso

me hace testigo privilegiado del vuelco que en los últimos

años ha dado la crítica de arte rumbo a su desaparición.

3.- Desde el Teatro Colón, en Buenos Aires, Régulo Pachano Olivares,

Gerente cultural que acompañó a Lía Bermúdez en la magna

aventura del Centro de Arte, con sus 30 años recién

cumplidos, le saluda: “Buen día querido Juan:

Le preguntaría si aún siente usted que quien “huye de la

ciudad huye de sí mismo”, como sucede en su poema del libro

Oh, Smog de 1977. Cómo explica entonces que lo mismo esté

sucediendo en estos tiempos presentes con tantos

venezolanos en tránsito…

JC

-Gracias por su saludo, querido amigo. Confío en la

conjetura de una pregunta que se explica por sí misma,

descrita completamente al azar y asentada en el libro Oh

Smog. En cambio, ¡Cuánta saudade experimento por su sabio

papel cumplido en el Museo Lía Bermúdez, para llevar a cabo

tal milagro!

4.-En Maracaibo, el físico, pensador y poeta, Américo Gollo Chávez,

quisiera leer de usted su evocación de una época muy

importante: “Su experiencia en Maracaibo, en la dirección de

cultura, (en LUZ) César David era el director…”.

JC

-Desaparecido el grupo Apocalipsis, y pasado el tiempo, en

1968, César David me pidió que lo acompañara en la

dirección de Cultura de la Universidad del Zulia, para la cual

fue nombrado por el Rector Régulo Pachano Áñez, y en la cual

entré para ocuparme del manejo de la actividad artística.

Entre una de las cosas que hice fue montar la única

retrospectiva del arte zuliano desde el siglo XIX hasta hoy que

se ha hecho en Maracaibo. Así como una reseña del tejido

guajiro reunido en los propios lugares donde se produjo en

base a piezas originales que se llevaron a Maracaibo para

hacer con ellas una exposición en el Instituto Andrés Eloy

Blanco en 1969 No tuve la misma suerte en la actividad

menuda, como conciertos y recitales. Privaban mucho los

intereses de grupos políticos encontrados, y el director Rincón

se vio lentamente privado de autoridad hasta tener que

desertar.

5.-Montado sobre el relámpago del Catatumbo irrumpe mi

tocayo, Alexis Fernández, con devoción de muchacho

esperando su koan: 1) Usted advierte en su nota introductoria al poemario Oh,

smog seguido de Una cáscara de cierto espesor, que “…

ambos libros, dada la temática que abordan y su lenguaje, se

complementan y vienen a ser expresión del cambio hacia un

registro urbano de raíz epigramática que el autor empezó a

experimentar en el interregno comprendido entre la

publicación de ambos textos, 1977-1985. ¿Esos años significaron la imposición del

andamiaje urbano sobre su lenguaje lírico y la temática poética. Que era ya una

presencia que venía presagiando nostalgias desde su

nacimiento en Altagracia de Orituco, en 1930 pasando por las

riberas del Orinoco hasta asumir la Caracas de macadam y

cabilla?

JC

-En efecto. Entre un libro y otro se van apreciando los

cambios que voy introduciendo para tratar los nuevos temas,

sin necesidad de romper la estructura de su lenguaje Y

alcanzar un estilo más intimista y reflexivo o despojado de

violencia, como el que se refleja en éste:

INTERSTICIO

Hay que oír la respiración del lector.

Hay que oírlo en el momento en que no se le escucha,

cuando está más atento a lo que no se dice.

Cuando en lo que en lo él oye sólo hay silencio.

Hay que oírlo en los intersticios del poema

cuando todavía no se ha escrito. (Minimales, 1993)

6.-Sigue preguntando, el tocayo Fernández: .Cuando Juan plantea en

“El libro de las poéticas”: “La poesía tal como la veo, siendo uno de los últimos asideros del alma,

y el más oscuro y vulnerable, verdaderamente tiene como fin

último repensar sus propios límites dentro de un

espacio verbal en cuyo centro, junto al vacío que habla

continúa estando el hombre. Y esto, en mi obra, se da

asociado… a la reconstrucción de la esperanza… así sea en

medio de los peores desastres” (2006). Él comparte con

Eugenio Montejo, las consideraciones de éste en cuanto a que

“…la poesía es una bendición porque uno tiene la certeza,

cuando se vincula a ella, incluso como lector, de que la poesía

es la última religión que nos queda, sustrato de lo que fue

en algún tiempo lo sagrado en la tierra. Una especie de isla de

salvación, de conexión con algo arcaico que hace que el

hombre sea hombre y que ha desaparecido o tiende a

desaparecer…” (1991), en entrevista con Miguel Szinetar.

Consideración que en algún momento también ha sostenido el

poeta Gustavo Pereira al afirmar que: “La poesía ha sido un largo camino hacia la otra conciencia,

allí donde la existencia humana se descubre, redescubre y

arriesga a plenitud. Hacia el ser y no hacia el parecer.

Ninguna uniformidad, ningún bajo fondo mercenario, ninguna

disociación —excepto la de los sentidos— le son

consustanciales. Acaso su misión, si es que alguna tiene, sea

únicamente avivar, nutrir, enaltecer, no dejar morir las fibras

sensibles de lo humano. Propiciar en definitiva el despertar

contra el letargo, el misterio contra la ordinariez, el portento

contra la postración, la inteligencia contra la estupidez, el

vivir contra el morir. Porque la poesía no es sólo una

referencia estética sino también una fuerza moral”(2002)

Estas tres percepciones coinciden entre sí en cuanto a

valoración óntica de la poesía, en cuanto a su desempeño y

praxis como lector y escritor, está Usted de acuerdo?

JC

En efecto, estoy de acuerdo con la filosofía de mis

amigos Eugenio Montejo y Gustavo Pereira poetas que desde

posiciones diferentes coinciden en defender a la poesía cual

un substratum del espíritu, una isla apersogada a dios, más

allá de la cual el poeta se considera en el deber de estimar a

todo lo que escribieron los demás poetas que le precedieron

en el uso de la palabra como a su propia obra, del mismo

modo en que, en otro orden de ideas, seguimos siendo hijos

de todos nuestros padres. (1999)

7.-Yehoshua Villarreal, recién ganador de la Bienal de

Salerno, en Italia, pregunta, desde Miami: “Primero quiero darle gracias al Eterno por su vida,

que le siga dando sabiduría, inteligencia, salud, prosperidad y mucha

paz. Segundo quiero darle gracias a usted por ser un atalaya

activo del arte, hacedor y cultivador del mismo, porque

hombres como usted provocan que el arte abra su boca y su

voz sea escuchada aquí, allá y en los cuatro puntos que

cercan la tierra, abajo y arriba… Mi pregunta es, en este tiempo de acumulada experiencia, si

el Arte le pregunta: ¿Y ahora, que vas a hacer conmigo? ¿Qué

le contestaría?

JC.

-DE EXISTIR OTRAS COSAS

Sería signo de buena salud

saber que el poeta puede salir

de sí mismo, aunque sea por un rato.

Pero antes tendría que comprobar

si en efecto existen otras cosas.

Y este aplazamiento lo reconforta.

8.-Artista de colores francos y contestatarios,

creador de volantines y de populares

“Mijolindos”, mi compadre Ender Colina trata

de arribar al boche su bola criolla ganadora:

“Buenos días amigo Juan . Ahí va la pregunta:

¿Por qué hay poco interés e iniciativa para

la investigación sobre los procesos

y los movimientos de las artes plásticas

en el país?

J.C.

-En principio porque desde hace tiempo

está faltando quien lo haga. Pero también

porque no existen las condiciones para

que se produzca ese interés.

Y también por la falta de una plataforma que

induzca a pensar en el arte como una

necesidad de la vida en la cual estén

claramente determinados los valores por los

cuales vale la pena alcanzarlos.

Esto no existe actualmente en

nuestro país.

9.-Fernando Asián, incluido en el 90 Salón de Otoño en

Madrid y gran seguidor del maestro poeta, dibujó sus líneas

con música concreta: “Juan tenía recopilado en una caja las imágenes necesarias

para elaborar una Historia del Arte de Venezuela, esto lo vi en

la época de Editorial Futuro cuando solíamos comer en

nuestra casa de San Cristóbal y planificar ese proyecto. Por el

interés que tiene para nosotros la educación y difusión

artística sería interesante saber si ha podido madurar este u

otro proyecto didáctico, hoy más necesario que nunca para

los jóvenes y cuya bondad estaría garantizada viniendo de

él…”.

JC

-Tengo entendido que Fernando Asián vivió en

Venezuela hasta hace poco. Era miembro de un pequeño

grupo de dibujantes españoles dedicados al Cómic

internacional que se confecciona para circular en revistas y

diarios de gran circulación. Por la falta de clientela en

Venezuela para su sofisticado arte, pero enamorado de las

bondades salvajes de nuestro país, Asián decide sumarse a

nuestro movimiento artístico y una vez establecido como

diseñador en San Cristóbal, Táchira, se hizo gran amigo del

suscrito.

10.-Vuelve a preguntar este entrevistador alucinado:

En la introducción de Fragmentos Manual

de Sobrevivencia, usted dice “…Y así como el europeo no ha

necesitado asomarse a América para construir su sistema de

mundo, a nosotros, los latinoamericanos, se nos ha impuesto

conocer, estudiar y predicar a Europa desde que tenemos uso

de razón. Somos una raza de síntesis humana, todo lo que el

mundo haga hoy y mañana tendrá que pasar por nuestro

saldo.” ¿Podría extender la inconmensurable dimensión de

esta suerte de manifiesto, o proclama? por supuesto es así. y

su obra da el ejemplo.

JC

  • “La memoria es como un muro demasiado alto. Puedo apreciarlo, calcularlo, medir la distancia a que me pone de la calle, es decir, del mundo, tomar impulso… pero nunca saltar sin correr un riesgo peligroso, ante el cual me rindo. Entonces no recuerdo. El muro es el miedo a lo que siempre sobrevendrá. De pronto me interrumpo. Un gran acontecimiento. Lo prefiero así. El mundo se estremece. Silencio. Ha comenzado a llover. No antes, sino ahora mismo. No aquí, sino lejos, pero ha comenzado a llover. Esto es, teóricamente hablando, muy importante. ¡Aunque en la práctica no me toca la lluvia, ella habla de lejos!, me hubiera gustado manosearla, eso sí, pero solo la presiento, es todo. La recuerdo fijamente como una buena lengua en mi mano y entonces toco suelo, estoy de buen humor, me invade una felicidad momentánea, río a carcajadas, dando vueltas por todo el cuarto. Cuento sus sílabas de agua, mi oído escucha una conversación: mi nombre dicho en voz alta. Me llaman. ¡Son los Ángeles, doctor, los ángeles! ¡Han vuelto!”. Bicéfalo.“Vienen con las lluvias”, p. 39.

11.-Un artista, Félix Calzadilla, vinculado con su familia, está generando cierto furor por la majestad de sus ideas de un dibujo que ocupa esencialmente los espacios públicos. ¡Podría darnos su impresión vinculada con ese proceso creador?

JC- AVENTURAS DEL DIBUJO CONTINUO… Dibujo de línea continua es el nombre que recibe una corriente de arte creada hace unos años por el aprendiz de pintura Félix Alejandro Calzadilla, quien de manera autodidacta creó en Maracaibo, por su cuenta, derrochando coraje ingenio y gusto de los colores vivos mientras realizaba hace algún tiempo las primeras piezas con que se anunciaba esta nueva corriente pictórica que goza hoy día en el Zulia de gran receptividad. Por Dibujo de línea continua se entiende este fenómeno de obras sin enmarcado, directamente ejecutadas con marcadores de color plano e intenso en muros y galerías de Maracaibo. Desde ese entonces este estilo de obras ha evoluconado mucho al punto de incorporar nuevos materiales y adoptar modalidades tcénicas como el collage sin restar pureza y precisión a una gama de colores vivos por el estilo Pop art. De modo tal que ha sido el propio autor el que ha dado mayor difusión al movimientos con sus presentaciones hechas de manera espontánea en calles y espacios privilegiados de la ciudad, y con el apoyo de público y de alguno que otro conocedor de arte. Si bien es cierto, que el movimiento ha seguido los pasos de su inventor Félix Alejandro, no puede decirse que éste ha estado librado de referencias como es la pintura mural que por encargo de nuestro gobierno realizara el pintor cubista Ferdinand Léger con destino a la ciudad Universitaria de Caracas , y asi llegar a un punto tal de evolución en que se abre para él, con su éxito ganado, una brillante perspectiva museográfica.

MEMORIA DE UN CREADOR

1.-En una época en que el crítico de

arte se formaba en la calle y no en

instituciones académicas o

museológicas y en que la actividad

crítica se confundía con la labor

periodística, no fue fácil para mi

generación escapar a la fascinación

que producía el descubrimiento de

los grandes movimientos del arte

moderno ni tampoco el interés que

despertaba el hecho de que fuéramos

testigos de una transformación del

arte venezolano que se extendió

también a otras disciplinas y en

especial a la literatura, tal como

pudo apreciarse en el surgimiento

de grupos innovadores como Sardio y

El Techo de la Ballena.

2.- En una época tan crucial y polémica en la

que casi se le pedía a todo el

mundo que tomara partido y gritara

su rabia a las puertas de los

museos, se hizo imperioso definir y

afirmar afinidades para integrarnos

a lo universal a partir de las

modestas contribuciones que aquí

hacíamos, comportamiento que parece

ser desde entonces una de las

peculiaridades del clima cultural

venezolano.

3.-De otra parte, los oficios o

vocaciones que se podían elegir

como ejercicio de vida no estaban

en aquella época tan reñidos ni se

excluían tan compulsiva y

competitivamente entre sí como hoy,

lo cual conducía a que no fuera

infrecuente encontrar entre los

pintores mismos gente pensante que,

igual que reflexionaba sobre su

trabajo, podía escribir ficción o

dedicar tiempo al pensamiento

crítico. No era extraño tampoco ver

a los escritores inclinarse sobre

el caballete para intentar

borronear una figura.

4.-Ahora bien, para continuar con

estas anotaciones autobiográficas,

diré que en l953, perdida la

oportunidad de graduarme y

frustrado políticamente por el

fracaso del plebiscito electoral

del año anterior, yo pensaba

seriamente en que podía dedicarme a

la literatura. Durante largas

temporadas en la provincia y en el

ocio de los difíciles días de una

prisión política en Caracas y de

varios meses de persecución en el

estado Guárico, había yo hecho

muchas lecturas de clásicos y

modernos y escribía poesía medida y

rimada.

5.- Recuerdo que Mariano Picón-

Salas me publicó en El papel

Literario de El Nacional una Égloga

inspirada en una famosa pieza

homóloga de Garcilaso. Aquel año de

l953 alcancé un premio en un

concurso de poesía en cuyo jurado

estaban Ida Gramcko y José Ramón

Medina. La torre de los pájaros

era ese largo poema de inspiración

withmaniana que dos años más tarde,

en 1955, editó en Valencia Felipe

Herrera Vial en los Cuadernos

Cabriales.

6.-Por esa época yo no tenía la menor

idea del género de actividad al que

podía consagrarme como medio de

vida. Pero la ironía es que de poco

sirvió aquel premio ni el estimuló

que le atribuí. De regreso en

Caracas, me dediqué afanosamente a

buscar un puesto de trabajo, pero

sólo conseguí que Pascual Venegas

Filardo, enfundado en su talante

huraño, me empleara a destajo en la

redacción de El Universal para

escribirle una columna semanal que

salió durante varios años en el

Suplemento Cultural de ese diario,

con el título de Reseña de la

Semana.

7.- Tengo que agradecerle a

este espacio la audacia de haberme

empujado a escribir regularmente

sobre libros y sobre las artes

plásticas y sus protagonistas. Por

esta época el periodismo era la vía

natural para el ejercicio de la

crítica e incluso para perseverar

en ella. No se editaban como hoy

libros de arte y lo que se

publicaba en los catálogos era

extremadamente simple aunque muy

sincero. Los escritores que se

aventuraban a escribir artículos

sobre arte, como Picón-Salas,

Meneses, Pineda, Armas Alfonzo,

Antillano y Carpentier, se sentían

como prestados a aquella actividad

y no hubo ni uno solo que, con la

excepción de Gaston Diehl, (un

francés radicado por entonces en

Venezuela) se considerara a sí

mismo crítico de arte.

8.-La museología estaba en pañales y no

había como hoy facultades de arte

ni revistas especializadas.

Fernando Paz Castillo y Enrique

Planchart se habían iniciado

bastante antes, en l919, como

gacetilleros en El Universal y

después que yo, escribiendo para

otro diario, lo hizo también

Roberto Guevara. No eran hombres

salidos de academias de arte.

9.-Pero cómo sabían. Por entonces Pedro

Ángel González dictaba cátedra a

las puertas del Museo de Bellas

Artes y ya había muerto uno de

nuestros docentes más agudos, esa

figura tan querida por los

valencianos de aquel tiempo que fue

Antonio Edmundo Monsanto,

cofundador del Salón Michelena.

10.- El éxito de un escritor está seriamente amenazado cuando por necesidad se ve llamado a expresarse simultáneamente en varias disciplinas; cuando encuentra en éstas pretexto para una obra total,más allá de los géneros. O cuando los mezcla a éstos para obtener un subproducto
híbrido que saca de quicio a los manualistas profesionales.

11.- AFORISMOS: El artista no renuncia a la vida. Es la vida la que suele escapársele. El arte es innovación, no conocimiento Por eso no tiene memoria de sí. Lo real para el artista es lo nunca visto. Quien muere no es tan culpable de su muerte como del hecho de que abandona el mundo. ¿Por qué ese silencio no se calla?Por que se ha enemistado con el ruido. ¡Él también quiere hacerse oír!…La finalidad del arte es hacer felices a los hombres. Dos quiera que también a los que lo hacen… Quien muere no es tan culpable de su muerte como del hecho de que abandona el mundo…Quien muere no es tan culpable de su muerte como del hecho de que abandona el mundo…Quien muere no es tan culpable de su muerte

como del hecho de que abandona el mundo…No hay como cuando se pierden

las cosas para desear recuperarlas…Pretende decir que la repetición del error

ayuda a no seguir combatiéndolo. ¡No sabe este tonto que la práctica

crea el hábito!… Un carácter débil en cuanto a que sabe ser consecuente con todas sus debilidades prueba que para ser débil se necesita carácter. EL ESPEJO

ES ADMIRABLE SU DON DE PERSISTIR. HASTA EL ESPEJO LO REPRODUCE.

¡FELIZ NAVIDAD..!

¡Salud!

Juan Calzadilla comparte a nuestros lectores, estos dos libros de su autoría:

libro EL HABITANTE PRECAVIDO – Juan Calzadilla

EL FABRICANTE DE MARCOS – SEP 2023

Alexis Blanco

Fuente de TenemosNoticias.com: noticialdia.com

Publicado el: 2023-12-22 15:42:38
En la sección: Cultura – Noticia al Dia

Publicado en Cultura

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