Murió Bill Richardson, pacificador y exgobernador de Nuevo México

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Bill Richardson, ex gobernador de Nuevo México, embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas y secretario de Energía durante la presidencia de Bill Clinton, falleció. Richardson tenía 75 años.

Mickey Bergman, vicepresidente del Centro Richardson, dijo en un comunicado el sábado que Richardson había muerto mientras dormía el viernes por la noche.

“Vivió toda su vida al servicio de los demás, incluido su tiempo en el gobierno y su carrera posterior ayudando a liberar a personas tomadas como rehenes o detenidas injustamente en el extranjero”, dijo Bergman.

“No había ninguna persona con la que el Gobernador Richardson no hablaría si esto contuviera la promesa de devolverle la libertad a una persona. El mundo ha perdido un defensor de aquellos retenidos injustamente en el extranjero y yo he perdido un mentor y un querido amigo”.

Richardson fue nominado al Premio Nobel de la Paz el mes pasado en reconocimiento a su trabajo para salvar a estadounidenses detenidos, más recientemente la jugadora de la WNBA Brittney Griner , quien fue arrestada en un aeropuerto de Moscú cuando las autoridades encontraron aceite de hachís en su equipaje. Griner fue liberado en diciembre pasado después de haber estado detenido durante casi 10 meses.

Durante las últimas tres décadas, Richardson viajó por el mundo negociando y asegurando la liberación de estadounidenses encarcelados en el extranjero en Bangladesh, Corea del Norte, Sudán, Colombia e Irak. Richardson viajó a zonas peligrosas, incluido el Congo, entonces llamado Zaire en 1997, y Afganistán en 1998 para negociar transferencias pacíficas de poder y se reunió con los infames dictadores Saddam Hussein, Fidel Castro y Kim Jong-il, respectivamente.

El Centro Richardson fue creado para apoyar el trabajo del exgobernador para facilitar el diálogo y la paz global, particularmente entre países con relaciones diplomáticas tensas. Se posicionó a sí mismo y a su organización sin fines de lucro como una alternativa a los canales diplomáticos tradicionales, particularmente para los países reacios a los poderes diplomáticos establecidos.

En su libro de 2013, “Cómo hablar dulcemente con un tiburón: estrategias e historias de un maestro negociador”, Richardson aconsejó: “Respete a la otra parte. Intenta conectarte personalmente. Utilice el sentido del humor. Dejemos que el otro lado salve las apariencias”.

Richardson nació como William Blaine Richardson en Pasadena, California. Se crió en la Ciudad de México y vivió con su madre mexicana. Su padre era un banquero estadounidense.

Richardson llegó a Nuevo México en 1978 y decidió postularse para un cargo político allí debido a sus raíces hispanas. Se le atribuye la transformación de la política de Nuevo México.

Durante su mandato como gobernador, estableció un salario mínimo anual de $50,000 para los maestros más calificados en todo el estado, un aumento en el salario mínimo estatal de $5,15 a $7,50 la hora, programas de prekínder para niños de 4 años y un salario mínimo de $400. millones de dólares en el sistema ferroviario interurbano entre Albuquerque y Santa Fe.

Entre otros logros, en la campaña electoral para la gobernación de Nuevo México en 2002, Richardson estableció un récord mundial Guinness de mayor número de apretones de manos por parte de un político en ocho horas: 13.392 apretones de manos.

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