El Sevilla gan al Copenhague (3-0) en un partido muy igualado, el festn de goles fue postrero, y mantiene sus opciones de seguir compitiendo por el continente.
Ftbol y necesidad son una de esas parejas incmodas a las que no les da vergenza discutir en pblico. El Sevilla de Jorge Sampaoli quera ganar el partido, pero plante un partido extrao. Airado y vano. Acumular hombres de ataque es lo contrario de atacar. El juego se embarulla, se desordena, se vuelve mastodntico y obtuso. Laterales ofensivos, interiores abiertos, mediapuntismo y tedio. Era un plan emocional, no tctico. Dolberg, el delantero elegido para un encuentro crucial, tampoco anim demasiado el juego. Miraba extraado los pases de sus compaeros. La primera mitad fue poco esperanzadora. Nadie pareca entender nada. Papu Gmez buscando constantemente a Suso en el costado opuesto. Isco sin profundidad. Y un Copenhague que defenda cmodo, bien situado, viendo los vaivenes de los nervionenses, que jugaban demasiado largo, demasiado lento, demasiado raro. Qu difcil es comer con hambre.
Tras dos tiros suaves de los locales, atacaron los visitantes con ms enjundia. Haraldsson oblig a Dmitrovic a realizar una meritoria estirada. Era el minuto 20. El partido estaba igualado. El extremo Daramy era confeti en la izquierda. Una gran jugada suya estuvo cerca de acabar en gol. Caracole en la mejilla del rea, dej atrs a su marcador y centr con intencin, pero ya sin fuerza. Con muy poco se haca un pasillo el equipo de Neestrup. Gudelj y Marcao achicaban con la ayuda de Jordn, ms pendiente de la retaguardia que del ataque. La mejor jugada de los blanquirrojos lleg en la recta final del primer tiempo. Rakitic cedi a Suso, que esperaba en el rea. Su disparo fue potente, pero accesible para Grabara, que palme a un lado. Lleg el descanso con la grada encendida y el equipo alicado. Entendera Sampaoli en ese mustio paseo hasta el vestuario que la presin es un medio, no un fin.
El primero del Sevilla
Un baln al palo del equipo dans tras el refrigerio espole al Sevilla. En–Nesyri y Lamela en el campo. Ms ruptura. Ms profundidad. Menos magreo con el cuero. Cerca estuvo de marcar Isco con un disparo que desvi con las yemas Grabara. Devolvi el golpe el rival, con un mano a mano que gan Dmitrovic. Con el Sevilla volcado sobre la meta nrdica, con el encuentro roto en dos, con el todo o nada deslizado sobre la mesa, lleg el gol. Papu Gmez centr al corazn del rea y En-Nesyri pein a gol. Respiraba el Snchez-Pizjun. El ariete marroqu tuvo que ser sustituido lesionado a los diez minutos del tanto. Mir ocup su puesto.
Bardghji y Cornelius entraron por el bando dans para equilibrar el marcador, pero el Sevilla se senta cmodo, ms horizontal y pausado. Aunque iba a tocar sufrir. El Copenhague asedi la meta andaluza en el tramo final del partido. Tras un largo saque de banda, Diks cabece al larguero. El Sevilla se encerraba mirando el reloj. Sampaoli caminaba ya sobre una zanja en las inmediaciones del banquillo. La victoria se encarnizaba. Pero donde no llegaba el ftbol, lleg el corazn. Isco agarr un baln en el 88, en el borde del rea y con una rosca maravillosa bati al portero de los leones. Cuando ya mora el partido, Montiel caz un rechazo del meta tras disparo lejano de Lamela, y dulcific an ms el marcador. Tres goles. Tres puntos. Y algo de ilusin.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es
Publicado el: 2022-10-25 14:57:39
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